¡Un Toro con raíces en Silao Guanajuato!
En 1978, Fernando Valenzuela firmó su primer contrato profesional, recibiendo un salario de 250 dólares mensuales con los Tuzos de Silao, equipo que competía en la Liga Central. En la foto que acompaña este relato, se le puede ver en su etapa inicial como jugador profesional, donde comenzaba a forjar el legado que lo convertiría en una leyenda del béisbol.
Durante ese año, Valenzuela tuvo una marca de 5 victorias y 6 derrotas, pero lo que realmente destacó fue su efectividad de 2.29, mostrando desde temprano su gran talento en el montículo. Su progreso fue rápido y, para 1979, ya estaba lanzando con los Leones de Yucatán en la Liga Mexicana a la corta edad de 19 años, donde continuó impresionando con su desempeño.
Fue entonces cuando los Dodgers de Los Ángeles se interesaron en él, comprando su contrato y llevándolo a las Grandes Ligas. Valenzuela hizo su debut en la MLB en septiembre de 1980, pero sería en 1981 cuando realmente alcanzaría la fama con la explosión de la llamada ‘Fernandomanía’. Ese año, su dominio en el montículo cautivó a los aficionados no solo en Los Ángeles, sino en todo el país, convirtiéndose en un ícono cultural y deportivo.
En 1982, Valenzuela hizo historia nuevamente, convirtiéndose en el primer jugador de la MLB en ganar un millón de dólares a través del arbitraje salarial, lo que subrayaba su valor en la liga. Su carrera continuó en ascenso y, en 1985, firmó el contrato más lucrativo de la historia para un lanzador hasta ese momento, asegurando un acuerdo por tres años y 5.7 millones de dólares, lo que reflejaba el enorme impacto que tenía en el béisbol.
Es importante destacar que, durante la década de los 80, ningún otro pitcher abridor atrajo a más fanáticos a los estadios de las Grandes Ligas que Fernando Valenzuela, apodado ‘El Toro’. En ese periodo, sumó un impresionante total de 12 millones de espectadores que acudieron a los parques solo para verlo lanzar, consolidando su lugar como una de las figuras más influyentes del béisbol en esa era.